Christian Louboutin respira más tranquilo. Sus zapatos de suela roja no podrán ser copiados. La justicia europea ha dado finalmente la razón al diseñador parisino de 54 años en su largo litigio por defender las famosas suelas rojas de sus zapatos de lujo, algunos con tacones de hasta 16 centímetros, que no faltan en el vestidor de celebridades como Carolina de Mónaco, Jennifer Lopez, Sarah Jessica Parker y Madonna.

La cuestión a dirimir era si se puede patentar o no un color como el elemento principal de una marca comunitaria. Y la respuesta que ha contestado el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) en este caso es que sí, que sus icónicas suelas rojas están protegidas y no pueden ser copiadas, que es lo que hizo una empresa holandesa de calzado Van Haren, que utilizó este elemento icónico en uno de sus modelos y lo puso a la venta a un precio sensiblemente inferior que unos zapatos de tacón de Louboutin, que no suelen bajar de los 600 euros.

Finalmente, Louboutin ha ganado la batalla judicial en la UE: su marca con la suela de color rojo -y no cualquier rojo, concretamente el Pantone 181663TP-, es válida y está protegida, según la sentencia hecha pública ayer.

El caso se remonta a hace seis años, cuando la empresa holandesa Van Haren vendía en sus tiendas zapatos de tacón alto con la suela roja. Louboutin le denunció ante un tribunal de Países Bajos por vulneración de su marca. Pero la compañía holandesa se defendió alegando que la marca en cuestión del diseñador francés era nula. Se escudaba en que la directiva de la UE sobre marcas prohíbe el registro de cualquier signo constituido exclusivamente por la forma de un producto, en este caso una suela. El juez holandés no lo vio claro y decidió preguntar sobre el caso al Tribunal de Justicia de Luxemburgo.

QUÉ ES MARCA / En su sentencia del Tribunal de Justicia de la UE da la razón al diseñador y considera válida la marca de color rojo de Louboutin. «En el presente asunto, la marca no consiste en una forma específica de suela de zapatos de tacón alto, dado que su descripción indica expresamente que el contorno del zapato no forma parte de la marca, sino que únicamente sirve para poner de relieve la posición del color rojo objeto del registro», señala el fallo del alto tribunal europeo.

La controversia en torno al uso de las famosas suelas rojas ha tenido un largo recorrido en otras instancias judiciales. El último envite se vivió hace tres semanas en el tribunal de apelación de París. Como ahora, los jueces se pronunciaron entonces a favor de la firma francesa de lujo y condenaron a la empresa Kesslord por copiar el diseño, obligándoles a abonar una indemnización de 7.500 euros. Lo mismo sucedió en el 2012, cuando el tribunal de segunda instancia de Nueva York estableció que la suela roja es propiedad de la firma francesa, siempre que contrastara con el resto del zapato. Zanja así una genial idea que nació como un auténtico arrebato. Según explicó en un libro el propio diseñador, en el 1993, cuando le daba vueltas a cómo mejorar una de sus creaciones antes de su salida al mercado, le cogió a su asistente, que estaba pintándose las uñas, el frasco de esmalte rojo y coloreó la suela negra del prototipo que estaba analizando. Lo aplicó al resto y el resultado le ha hecho historia.