El escritor y ensayista mexicano Sergio González Rodríguez (1950) , conocido por su trabajo de denuncia de los feminicidios de Ciudad Juárez, falleció este lunes por un infarto en México a los 67 años.

Sergio González destacó por sus investigaciones sobre la violencia en la fronteriza Ciudad Juárez, un tema que analizó en diversos artículos del diario 'Reforma' y en el libro 'Huesos en el desierto'. Publicado en el 2002, en este volumen denunciaba la ola de feminicidios en la ciudad norteña mexicana, así como las repetidas violaciones y torturas a niñas y mujeres. Crímenes que enmarcaba dentro de una trama de complicidad entre delincuentes, autoridades locales y cuerpos de seguridad, beneficiados por el contexto de impunidad reinante en el país.

PREMIO ANAGRAMA DE ENSAYO 2014

En 'El hombre sin cabeza' (2009) habló de los usos rituales de la violencia por parte de grupos criminales y en 'Campo de guerra'(Premio Anagrama de Ensayo 2014) planteó la imposición de la vigilancia militar con el pretexto del combate contra el terrorismo.

El escritor se licenció en Letras Modernas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Ejerció como investigador de la Dirección de Estudios Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, fue también guionista de la serie histórica televisiva 'México, siglo XX' y director de la publicación 'El Nacional Dominical'.

Entre otros reconocimientos, Sergio González obtuvo el Periodismo Cultural Fernando Benítez 1995, el Homenaje Nacional Fernando Benítez en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2015 y el Premio Casa Amèrica Catalunya a la Libertad de Expresión en Iberoamérica 2013.

La secretaria de Cultura de México, María Cristina García Cepeda, lamentó "profundamente" la muerte del escritor, y en un mensaje en la red social Twitter expresó su pésame "a sus deudos y al diario 'Reforma'", donde trabajaba como columnista.

El escritor Jorge Volpi defendió en el comunicado del INBA que González Rodríguez "fue uno de los cronistas fundamentales de nuestra época y, sobre todo, de algunos de sus lados más oscuros", particularmente en su tarea como cronista. Volpi recordó que en sus obras de ficción también exploró las sombras de la naturaleza humana.