Mario Hvala es un peluquero serbio que ha decidido zambullir sus tijeras y navajas en el ambiente futbolístico que ya invade el planeta, a dos días del inicio del Mundial. En su salón de Novi Sad, Hvala es capaz de esculpir en las cabezas de sus clientes retratos fidelísimos de las grandes estrellas, Messi y Cristiano Ronaldo.

El peluquero lleva 9 años llevando el arte a las cabelleras de todo el que se atreva a lucir una de sus creaciones. Todo empezó, cuenta, un día en que un cliente le dijo "hazme algo diferente", y él le esculpió una tarántula. "Los retratos son lo más difícil de hacer en lo que llamamos 'tatuaje capilar', porque se tarda entre cinco y siete horas en hacerlos", explica Hvala, de 35 años.