La edad de oro de la televisión no es solo para la excelente y masiva producción de series y programas, sino también en el interés que esta forma de consumo audiovisual está logrando en todo el mundo, y especialmente en España, un mercado que hasta ahora era de los más reacios de Europa a pagar por ver. Pero esta realidad está cambiando, ya que el parque de abonados a la televisión de pago en España ha vuelto a batir un nuevo récord en la estadística de la Comisión Nacional de Mercados y la Competencia (CNMC).

Según datos correspondientes al segundo trimestre del 2017, la cifra de suscriptores ha llegado a 6.143.868, casi 50.000 más que en el primer trimestre del pasado año (6.092.984). El aumento interanual de abonados ha sido de un 4,7%.

La televisión IP y la de cable han sumado en el último año en conjunto 400.000 nuevos clientes, en contraposición al descenso de 172.000 abonados registrado por la de satélite.

Movistar+, líder

La televisión IP es líder con 3,56 millones, y por operadores, Movistar+ está a la cabeza con 3,65 millones de abonados, seguida de Vodafone (1,3 millones) y Orange (528.000 suscriptores).

También los ingresos de la televisión crecen en el segundo trimestre del 2017, tanto los de la televisión en abierto (de 465,2 millones a 516,5 millones), como los de pago (de 520,7 millones a 522 millones de euros).

También sube la facturación publicitaria de la televisión privada (de 417,5 a 471,2 millones) y la de la pública (de 25 a 28 millones).

En cuanto al pago por visión (pay per view), se realizaron en el segundo trimestre casi 200.000 contrataciones menos de películas (1.526.910 frente a 1.711.624) y unas 10.000 más de cine para adultos (de 275.000 a 285.000).