La Administración de Donad Trump ha abierto un nuevo frente en su guerra con los medios de comunicación a propósito de un programa secreto de cárceles de la CIA. El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, ha negado que un texto que los medios tratan como un borrador de una orden ejecutiva haya sido redactado por la Casa Blanca.

Se trata de un documento polémico, pues plantea la reinstauración del polémico (y dudosamente legal) programa de cárceles secretas de la CIA fuera de Estados Unidos. Según han explicado fuentes de la Casa Blanca a la cadena Fox, se trataría de uno de los "miles de documentos" escritos durante el periodo de transición.

Según el texto que tienen los medios, titulado “Detención e interrogatorio de combatientes enemigos”, los interrogatorios clasificados de la CIA forman parte de “autoridades críticas para la defensa” que se han dejado de ejecutar y se plantearía un estudio para decidir si reinstaurarlos. En el borrador sobre el que ha informado la agencia Associated Press se incluye, textualmente, la frase de que “ninguna persona en custodia de EEUU debe en ningún momento ser sometida a tortura o tratamiento o castigo cruel, inhumano o degradante, como marca la ley estadounidense”.