Cerca de 40 milicianos del grupo chií libanés Hizbulá y otros combatientes leales al presidente sirio, Bachar al Asad, fallecieron en ataques de aviones no identificados contra sus posiciones en la frontera de Siria con Irak, informó este lunes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La ONG destacó que los bombardeos se produjeron en la zona de Al Bukamal, en el este de Siria, y que se desconoce de momento si las víctimas son libanesas o iraquíes, pero advirtió de que su número podría aumentar porque hay muchos heridos en estado grave y desaparecidos.

Por su parte, la agencia de noticias estatal siria, SANA, responsabilizó a la coalición internacional liderada por Estados Unidos del bombardeo contra, según la fuente, unas de las posiciones del Ejército gubernamental al sureste de Al Bukamal.

Una fuente militar citada por SANA dijo que la coalición atacó una posición castrense en la localidad de Al Hari y causó varios muertos y heridos en las filas gubernamentales, pero no ofreció una cifra exacta de víctimas.

CERCO AL ESTADO ISLÁMICO

Según la agencia oficial, el bombardeo se produce tres días después de que unidades del ejército sirio tomaran el control de una extensa área en la zona desértica próxima a la ciudad de Al Mayadín, en el este de la provincia de Deir al Zur (noreste), que estaba en manos del grupo terrorista Estado Islámico (EI).

SANA aseguró que el ataque es "un intento de la coalición internacional de animar a los terroristas derrotados por el Ejército sirio" en los pasados días.

Ayer, el Observatorio informó de la muerte de ocho efectivos de las fuerzas gubernamentales y sus aliados en enfrentamientos con el EI en el desierto de Deir al Zur.

La ONG señaló que los yihadistas se encuentran entre Al Bukamal y Al Mayadín y preparan una amplia operación contra las fuerzas del Gobierno sirio en un territorio desértico ubicado al oeste del río Éufrates en la citada provincia.