El ministro de Asuntos Exteriores de España, Alfonso Dastis, cerró su primera visita oficial a Cuba con el logro de haber concretado para principios de 2018 una esperada visita al máximo nivel a la isla, previsiblemente en enero y de los reyes Felipe VI y Letizia. Dastis mantuvo una intensa agenda que culminó con un encuentro de más de dos horas con el presidente Raúl Castro, quien aprovechó el viaje del canciller Bruno Rodríguez a Madrid el pasado abril para enviar una invitación formal a los reyes de España y al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para visitar la isla.

El encuentro con el mandatario cubano se desarrolló en un "ambiente de gran cordialidad", señaló Dastis a la prensa desde el aeropuerto de La Habana, antes de partir para Tallin (Estonia) a la cumbre informal de ministros de Exteriores de la Unión Europea. Sobre esa visita de alto nivel, el ministro Dastis no fue muy explícito en sus declaraciones a la prensa, pero sí dijo que la invitación fue de "jefe de Estado a jefe de Estado", por lo que "no tendría nada extraño" que fueran Felipe VI y su esposa quienes visitaran primero Cuba, en vez de Rajoy.

La opción de los reyes también parece la predilecta de las autoridades cubanas, ya que en las palabras previas a la reunión entre los dos ministros de Exteriores, el canciller cubano se refirió expresamente a una visita de los reyes.

PRIMERA VISITA

La visita de Felipe VI a Cuba sería importante para la antigua colonia, ya que su padre, el rey emérito Juan Carlos I, solo estuvo en La Habana en 1999 para acudir a una Cumbre Iberoamericana, a la que también asistió el entonces presidente José María Aznar. La única visita oficial de un presidente del Gobierno español a Cuba fue la de Felipe González en 1986.

Mientras fue presidente de Cuba, el fallecido Fidel Castro, declarado "juancarlista", siempre quiso recibir una visita de Estado de Juan Carlos I, pero nunca se concretó porque la relación entre España y Cuba se tensó durante el gobierno de Aznar (1996-2004), quien impulsó en la Unión Europea (UE) la "posición común", una restrictiva política respecto a Cuba.

Aunque no precisó fechas para esa visita de máximo nivel, Dastis subrayó que se trabaja con "un horizonte temporal claro", antes de febrero de 2018, cuando Raúl Castro abandone el cargo de presidente, ya que fue él quien cursó la invitación a los jefes de Estado y de Gobierno de España. "Puede ser perfectamente a principios de año", puntualizó.

VÍNCULOS ECONÓMICOS

La visita real llegaría en un momento de "dinamización" de los nexos bilaterales, con una mayor colaboración política -impulsada con la firma el año pasado del primer acuerdo de diálogo político y cooperación Cuba-UE- y de mayores vínculos económicos y empresariales. Para conocer sus inquietudes, el ministro abrió su jornada con un encuentro con representantes de la Asociación de Empresarios Españoles de Cuba (AEEC), la única de ese tipo legal en la isla y que cuenta con más de 230 firmas registradas.

España es el país con más empresas mixtas en Cuba, es su tercer socio comercial con un intercambio de 1.300 millones de dólares en 2016 -solo detrás de China y Venezuela-, y uno de sus principales inversores sobre todo en el turismo, aunque quiere ampliar su papel en sectores como construcción, energía y servicios financieros. Sin embargo, los proveedores españoles arrastran desde hace dos años impagos del Estado cubano, con serios problemas financieros y de liquidez que le llevaron el año pasado a su primera recesión en 23 años.