La Administración de Donald Trump ha cancelado los permisos temporales de residencia en Estados Unidos concedidos hace casi dos décadas a 200.000 salvadoreños por razones humanitarias, una medida que deja en el aire el futuro de todos ellos. Según informan varios medios estadounidenses, en los próximos días se les comunicará que tienen hasta septiembre del 2019 para salir del país o regularizar por otras vías su estatus de residencia. A todos ellos se les permitió asentarse y trabajar legalmente en EEUU después de que varios terremotos asolaran el pequeño país centroamericano en 2001. La decisión llega solo unas semanas después de que se adoptara una medida semejante con 45.000 haitianos que emigraron a Estados Unidos después del 2010.

El nuevo anuncio se oficializará en las próximas horas, aunque ya ha sido comunicado por el Departamento de Seguridad Interna a los miembros del Congreso. La medida supone una nueva vuelta de tuerca en la política de la Administración Trump para restringir la emigración y expulsar a los inmigrantes indocumentados que viven en EEUU. Tanto a los salvadoreños como los haitianos se les concedió en su día un estatus temporal protegido, una figura jurídica con carácter transitorio que, según la Administración, solo puede enmendar el Congreso para transformarlo en permanente. “Los 18 meses de plazo para cancelar su estatus concederán al Congreso tiempo suficiente para elaborar potencialmente una solución legislativa”, dice la carta enviada por Seguridad Interna a los congresistas.