Quizás no le conozcan por su nombre, pero seguro que habrán visto su trabajo. Pete Souza, fotógrafo del expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha sido el último de muchos en iniciar su particular oposición contra el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, empleando aquello que mejor se le da: la fotografía.

Souza dejó de ser el fotógrafo presidencial oficial con la victoria electoral de Trump, pero tras ocho años fotografiando a Obama, su relación con él no terminó al abandonar la Casa Blanca. A pesar de ser otro perfil más de los muchos que tiene Instagram, Souza no ha dado por terminada su relación con Obama y ha continuado colgando fotos de su trabajo con el expresidente de una curiosa manera.

Las fotos de Souza en su cuenta personal han sido elegidas con sumo cuidado de forma que en ellas algunos han visto un sutil boicot al nuevo presidente. Poco después de que Trump firmara una orden ejecutiva dirigida a proteger al país de los "terroristas islámicos radicales", Souza publicó una foto de Obama riéndose con una niña refugiada que llevaba un hiyab. Como si fuera una gran casualidad, después el fotógrafo publicó otra imagen del presidente con un niño, esta vez estadounidense, pero conocido por haber mandado una carta a Obama pidiendo ayuda para el niño sirio cuyo vídeo en estado de shock conmocionó al mundo.

Como en las anteriores ocasiones, tras conocerse la llamada entre Peña Nieto y Trump en la que el Trump amenazó a su homólogo mexicano con enviar al Ejército, Souza colgó otra imagen de Obama tomando tequila con Peña Nieto en un ambiente relajado y agradable. Algo parecido ocurrió cuando se supo que Trump y el presidente australiano, Malcolm Turnbull, habían mantenido una conversación un tanto agresiva por teléfono. En esta ocasión Souza compartió una imagen de Obama riendo con Turnbull.

Con la misma sutileza que en los casos anteriores, Souza compartió una imagen en la que aparecía Obama con gran parte de su equipo en una gran mesa en la Casa Blanca tras conocerse que Trump había estado manteniendo importantes reuniones estratégicas en secreto durante sus primeros días de mandato. Y del mismo modo, tras las alegaciones de falta de diversidad de género en el equipo de Trump, Souza publicó otra instantánea del expresidente reunido con sus mayores consejeros, todas ellas mujeres, en las que tan solo se veían los zapatos de tacón de ellas y a Obama sentado sobre la mesa en una postura bastante informal.

¿Casualidad? Puede que lo sea y que la elección de las imágenes del perfil de Souza no haya tenido jamás un doble sentido, pero es innegable que el estilo de ambos presidentes ha sido opuesto desde el principio, algo que Souza ha transmitido, queriéndolo o sin querer, con sus imágenes.