El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha asegurado hoy que "los excesos de los nacionalismos" se han convertido en un "verdadero cáncer de la Europa moderna" en el proceso de construcción comunitario.

García-Margallo ha hecho esta afirmación durante su comparecencia en el Congreso ante la Comisión Mixta para la UE, en la que ha informado de los ejes principales de su política en esta materia. El ministro ha señalado que los logros de la construcción europea logrados en el último medio siglo no deben hacer olvidar "los verdaderos objetivos de la empresa".

En primer lugar, ha citado la necesidad de "superar el estrecho y angosto cerco del Estado-nación para imposibilitar los excesos de los nacionalismos, verdadero cáncer de la Europa moderna".

A continuación, ha abogado por "defender la democracia como sistema para encauzar las opiniones divergentes en una sociedad plural". Como último reto, se ha mostrado partidario de dotar a Europa de una "voz fuerte y poderosa" para defender sus ideas, sus valores y sus intereses.

García-Margallo ha opinado que el proceso de construcción europea ha ido variando, pero ha manifestado su convicción de que "el destino final de Europa es la unión política". El titular de Exteriores ha expresado su apoyo a la adhesión de Turquía a la UE y también a que se conceda a Serbia el estatuto de país candidato.

Sobre Kosovo, ha insistido en que España no reconocerá la independencia de esta provincia serbia de mayoría albanesa. Ha subrayado que "no hay posición europea común al respecto" y que la UE "no puede reconocer Estados", al ser una competencia exclusiva de cada país.

España es uno de los cinco socios de la UE, junto con Rumanía, Eslovaquia, Grecia y Chipre, que se opone a reconocer a Kosovo, al igual que otros países, como Rusia, China, India y la mayoría de los iberoamericanos.

A pesar de este rechazo, García-Margallo se ha mostrado favorable a facilitar el diálogo y la cooperación de la UE con Serbia y Kosovo. "Kosovo y los kosovares no plantean problema alguno para España. Sí nos oponemos a la declaración unilateral, porque va en contra del derecho internacional", ha señalado.

El senador del PNV Iñaki Anasagasti ha criticado el comentario del ministro de decir que los nacionalismos son el "cáncer" de Europa. Anasagasti ha opinado que son los "nacionalismos de estado" los que generan un efecto negativo, porque los nacionalismos sin estado poco ruido pueden meter".

El parlamentario vasco también ha censurado que España no quiera reconocer a Kosovo.

"Sabemos lo que hay detrás" de esta posición, ha añadido Anasagasti, para quien el Gobierno del PP tendría una postura contraria "si no existieran Cataluña o Euskadi".