La Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC), uno foro clave en la agenda de política internacional, ha evidenciado la alianza estratégica que mantienen Arabia Saudí e Israel en Oriente Próximo al compartir como principal enemigo a Irán. Durante la última jornada de este domingo, tanto el primer ministro israelí, el derechista Beniamin Netanyahu, como el ministro de Exteriores de la monarquía saudí, Adel al Jubeir, han cargado una vez más contra el acuerdo nuclear que el Grupo 5+1 (los cinco países permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, más Alemania y la UE ) firmó en el 2015 con Irán y que ha permitido levantar las sanciones al régimen de Teherán.

Irán "es la mayor amenaza para el mundo, no solo para Israel y Oriente Medio", ha dicho Netanyahu. "Una vez tenga un arma nuclear, será más difícil detenerlo", ha avisado el primer ministro hebreo que ha acusado al Estado persa de pretender establecer "un imperio" en la zona. "Israel ( la única potencia nuclear en la región) tiene sus líneas rojas. Actuaremos sin dudar para defendernos, no solo contra los aliados iranís, sino contra el propio Irán”. Netanyahu ha avisado de la creciente influencia del régimen de Teherán en Oriente Próximo.

GRUPOS YIHADISTAS

El jefe de la diplomacia saudí, por su lado, ha pedido "meter presión" y "aislar" a Irán del mundo "para que vea que sus políticas no son correctas". Los dos países libran una guerra soterrada en la región. Los saudís apoyan a las monarquías y a los países de mayoría suní y ha financiado a lo largo de los años la versión más radical del islam, que profesan los grupos yihadistas. Irán, por su lado, mantiene una estrecha relación con sus aliados chiís: el Gobierno de Irak, el régimen de Bashar al Asad en Siria, la milicia de Hizbulá en El Líbano y los rebeldes hutís del Yemen.

Netanyahu ha aprovechado su intervención en la MSC para mostrar un pedazo del supuesto drone iraní que Israel asegura que derribó la semana pasada mientras sobrevolaba su territorio y que Irán niega. "No pongan a prueba la determinación de Israel", ha dicho Netanyahu dirigiéndose a Mohamed Yavad Zarif, el ministro de Exteriores iraní. Zarif, por su lado, ha calificado de "circo cómico que no es digno de respuesta" las amenazas y acusaciones del líder israelí de quien ha dicho trata de esquivar así sus "crisis internas", en referencia a la posible imputación de Netanyahu por un caso de corrupción.

También ha acusado al Estado hebreo de provocar de forma deliberada una escalada de tensión en la zona con sus "casis diarias incursiones en el espacio aéreo sirio". Al respecto, Zarif ha recordado el avión de combate F-16 israelí que fue abatido por fuerzas sirias la semana pasada. "Lo que ocurrió hace unos días demuestra que la idea de que Israel es invencible se ha derrumbado", ha añadido.