El presidente de EEUU, Barack Obama, y su homólogo chino, Hu Jintao, han comenzado una reunión en Seúl, antes de la inauguración de la II Cumbre sobre Seguridad Nuclear, para tratar, entre otros asuntos, sobre el programa nuclear norcoreano. Obama busca persuadir a Hu, cuyo país es el principal aliado de Corea del Norte, para que presione a Pyongyang y este régimen renuncie a su amenaza de lanzamiento de un satélite de observación sobre un misil de largo alcance el mes próximo, en conmemoración del centenario del fundador del país, Kim Il-sung.

EEUU considera que esa iniciativa norcoreana violaría resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y pondría en peligro el acuerdo del mes pasado, por el cual Corea del Norte se comprometía a renunciar a sus pruebas nucleares y de misiles de largo alcance a cambiuo de 240.000 toneladas de ayuda alimentaria. En un discurso hoy en la universidad Hankuk de Seúlk, Obama instó hoy a los líderes norcoreanos a "tener la valentía de buscar la paz" y dar una nueva vida a los ciudadanos de Corea del Norte, e insistió en que "no habrá recompensas para las provocaciones".

Por otra parte, el mandatario norteamericano se ha comprometido a continuar el proceso de desarme nuclear con Rusia. "Tenemos muchas más armas nucleares de las que necesitamos", declaró Obama a los estudiantes. El presidente norteamericano y su homólogo ruso saliente, Dmitri Medvédev, se entrevistaron y reconocieron diferencias y tensiones en las relaciones entre los dos países, entre ellas en torno a Siria o la defensa antimisiles, pero prometieron que continuarán la colaboración.