Unos 4.000 civiles escapan a diario del oeste de Mosul, donde las fuerzas iraquíes apoyadas por una coalición internacional combaten a los yihadistas del Estado Islámico, un fuerte aumento respecto a la última semana.

Esta es la cifra de desplazamiento cotidiano más elevada que se ha observado desde el inicio del conflicto, precisó la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

Ello implica que únicamente desde el pasado día 19, cuando el Ejército iraquí reanudó su ofensiva para expulsar a los terroristas de esa parte de la ciudad, cerca de 30.000 personas se han desplazado, de las cuales la gran mayoría se ha dirigido a campamentos de acogida.

Si se consideran los cuatro meses y medio transcurridos desde que empezó la operación militar para la reconquista de Mosul, que el Estado Islámico controlaba en su totalidad desde mediados de 2014 y a la que había convertido en su "capital" en Irak, un total de 255.000 personas han tenido que escapar.

Sin embargo, alrededor de 63.000 han retornado a la parte oriental de la ciudad (norte de Irak), tras su liberación del Estado Islámico.

Ante estos acontecimientos, el ACNUR indicó que está apresurando la ampliación del campamento para desplazados de Hamam al Alil, ubicado en una zona que goza de seguridad a 25 kilómetros al sur de Mosul, ya que su capacidad para 15.000 personas está colmada.

Asimismo, se está levantando un segundo campamentos y realizando trabajos adicionales que permitirán aumentar la capacidad de recepción hasta las 250.000 personas, que coincide con la estimación del Gobierno iraquí sobre el número de civiles que serán desplazados a lo largo de esta ofensiva militar.

En una conferencia telefónica desde la ciudad iraquí de Erbil, el coordinador de emergencia del UNICEF para la operación de Mosul, Bastien Vigneau, indicó que de aquellos que han sido desplazados desde el pasado octubre, 100.000 son niños.

De ellos, 15.000 huyeron del oeste de Mosul en la última semana por los fuertes combates, con 900 que llegaron solos al campamento de Hamam al Alil.

En la mitad de casos se les logró reunificar posteriormente con sus familias.

Vigneau comentó que las prioridades en el caso de los niños son detectar los casos de malnutrición e inmunizarlos contra el sarampión y la polio.