La asociación San Vicente de Paúl de Benicàssim atiende, a lo largo de este año, a unas 150 personas necesitadas del municipio, prestándoles ayuda con alimentos y productos de primera necesidad. El colectivo puede dar servicio a estos ciudadanos en situación de riesgo gracias a los fondos que obtiene, entre los que se encuentran los pertenecientes a la subvención que recibe del Ayuntamiento que, en el presente ejercicio, ha sido ampliada hasta alcanzar los 7.000 euros, frente a los 5.000 de los ejercicios anteriores.

Una cantidad que ha servido para equilibrar la bolsa de la compra con huevos, carne y demás productos frescos, “que son los que no ya llegan desde Europa”, explicó Alfredo Marqués, desde San Vicente de Paúl.

Además, la entidad da clases de repaso para ayudar a niños de familias con falta de recursos a hacer los deberes a diario y cuenta con un ropero. H