Los burrianenses se volcaron en masa en la ofrenda floral a la patrona, la Virgen de la Misericordia, en un día de Sant Josep muy soleado. La corte de honor, pero especialmente la reina fallera, Aida Bort, no pudo contener las lágrimas en el tramo final del desfile, en su estancia en el tapiz y al finalizar el himno regional.

La concentración tuvo lugar en el patio del colegio Salesiano y, desde allí, una a una, fueron partiendo las 18 comisiones de la localidad. Junto con la de la Mercé desfilaron también las representantes de la foguera Plaza de Gabriel Miró con la que están hermanados y, justo después, las reinas falleras de la ciudad de los últimos ejercicios. Antes de la corte de infantil les llegó el turno a las que fueron las máximas representantes burrianenses hace ahora 25 años con sus dos reinas, Mª Carmen Marín González y Gloria Fandos Montor, mayor e infantil respectivamente, parte de sus cortes y también algunos de los que entonces fueron miembros de Junta Local Fallera.

Las representantes infantiles de las fiestas de la Magdalena también quisieron estar presentes en la ofrenda floral, al igual que las de la Bellea del Foc d’Alacant. También participó el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, que partió junto al alcalde y al presidente de JLF, todos ellos detrás de la reina.

La calles del recorrido estuvieron completamente abarrotadas desde el inicio del trayecto, pero especialmente en la parte final del mismo ya que las falleras que habían finalizado decidieron quedarse para ver pasar a las cortes de honor y las reinas de Burriana. Cada fallera entregó un ramo o cesta a la Virgen de la Misericordia en una ofrenda que completaba la parte inferior del tapiz ya de por sí multicolor confeccionado para la ocasión por el burrianense Juan Dualde.