El Ayuntamiento de Castellón ha aprobado un plan de reducción de la deuda que prevé rebajar el pasivo bancario de los actuales 127,2 millones de euros a solo 55,8 millones a finales del próximo año 2017. El consistorio se ha acogido al real decreto-ley que aprobó el Gobierno el pasado mes de julio para refinanciar su deuda y, lo que es más importante, abaratar el tipo de interés que está pagando a los bancos del actual umbral del 6% a cerca del 2%, según ha explicado el concejal de Hacienda, José Masip.

El plan, pendiente de autorización del Ministerio de Hacienda, afecta al préstamo de 48,8 millones de euros que se contrató en julio del 2012 con 11 entidades bancarias para poner a cero el contador de facturas pendientes de pagar a proveedores. Según Masip, esa reducción del tipo que se añade al euríbor permitirá “ahorrar en el pago de intereses entre 4,5 y 5 millones de euros”. Ese dinero deberá reorientarse a amortizar deuda y a pagar facturas pendientes a proveedores para reducir el plazo de espera, que en el segundo trimestre del año se situó en 39 días.

Ese plan ahora aprobado prevé rebajar el porcentaje de deuda sobre los recursos corrientes del actual 84,44 al 36,56% programado en el horizonte del 2017. José Masip ha afirmado que el reto a corto plazo es bajar del 75% de endeudamiento dado que, en ese momento, la ley obligaría al Gobierno central a reducir el férreo control que ejerce ahora sobre las cuentas municipales.

Un segundo aspecto notable del plan es que permitirá dejar de amortizar en los tres próximos años 6.985.709 euros gracias a este primer año de carencia. El consistorio también destinará ese dinero a reducir su deuda comercial y a saldar facturas pendientes de pago con proveedores.

El concejal de Hacienda ha asegurado que la refinanciación del pasivo será positivo porque permitirá compensar “el problema del exceso de transferencias del Estado que ahora nos toca devolver por la mala previsión del Gobierno de Zapatero, que nos dejó un agujero de 20 millones”.

La refinanciación de la deuda no es bien vista por el PSPV-PSOE. El concejal Javier Peris considera que “el ahorro de 900.000 euros en el primer año será una herencia envenenada para el próximo equipo de gobierno” que salga de las urnas en mayo del 2015, una lectura en la que también coincide la portavoz municipal de Esquerra Unida, Carmen Carreras.

Al margen de la deuda, el consistorio prevé cerrar el presupuesto del 2015 con un grado de ejecución superior al 90%. H