La segunda fase del plan de ahorro energético mediante el apagado parcial de farolas durante la noche que se pondrá en marcha en los próximos días en Castellón afectará a 14 grandes viales, tres zonas verdes e incluso el patio de un colegio público. El ahorro anual estimado por el consistorio rondará los 108.000 euros.

La medida se focaliza sobre todo en los grandes bulevares del distrito oeste, como la carretera de Borriol, la avenida Barcelona, el puente de la universidad o la ronda del río Seco. También se extiende a otros puntos de la ciudad como el parque del Auditori, el de Rafalafena, la avenida Lidón o la de Capuchinos, en el norte; las avenidas del Puerto y Hermanos Bou, en el este; o la avenida Valencia, en el distrito Sur.

El equipo de gobierno que preside Alfonso Bataller generalizará la desconexión nocturna de un tercio del alumbrado público para rebajar la factura eléctrica, que asciende a unos cinco millones de euros cada año, al resto de distritos de la ciudad durante las próximas semanas.

El objetivo final es recortar los gastos anuales por este concepto en un millón de euros al ahorrar un 40% en el consumo.

El alcalde de la capital ya puso en marcha el pasado día 16 la primera fase de este plan de ahorro con el apagado nocturno de una tercera parte de las luminarias públicas de la ronda de circunvalación y de la avenida Ferrandis Salvador, en este caso con una rebaja estimada de la factura de 80.000 euros anuales.

SUSTITUCIÓN DE LEDS // Por otro lado, el consistorio municipal participará en el segundo programa de ayudas para la sustitución de ópticas de semáforos a la nueva tecnología led convocado por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía.

El consistorio espera obtener una subvención económica del ente dependiente del Gobierno central para renovar leds y reducir también el consumo energético de algunos semáforos.