Las empresas pirotécnicas españolas acumulan deudas impagadas por los ayuntamientos en los últimos tres años que alcanzan hasta el 60% de los cobros correspondientes a un ejercicio y algunos de los consistorios llevan entre dos y tres años sin hacer efectivo el pago por espectáculos de fuegos artificiales. Así lo ha asegurado a Efe el presidente de Piroval (Agrupación de fabricantes pirotécnicos de la Comunitat Valenciana), Vicente Caballer, quien augura que si esta situación persiste “serán pocas las empresas del sector que todavía puedan sobrevivir”.

A estos retrasos en los pagos se añade la reducción en los presupuestos que los ayuntamientos destinan a fuegos artificiales, que han disminuido entre un 40 y un 50% en la mayoría de los casos, mientras que otros han optado por una decisión más contundente: no contratar pirotecnia.

Caballer alerta de que las 220 empresas del sector que hay en España están en peligro de perder puestos de trabajo y “algo más importante” como es, a su juicio, la especialización de los empleados, que en muchos casos pasa de generación en generación. Entre las pirotecnias consultadas, Pirotecnia Caballer mantiene impagado el 25% de los cobros correspondientes a 2010 y entre el 50 y el 60% del 2011, la mayoría de ellos cantidades adeudadas por ayuntamientos y entidades locales.

La empresa de Reyes Martí (de Burriana) ha registrado un descenso de la facturación del 40% respecto a 2009 y 2010 por la reducción de gastos en espectáculos de este tipo. “Como no nos ingresan -las deudas- estamos metiendo nuestro patrimonio personal en la empresa para pagar a proveedores y al personal”, según Martí, cuya empresa no ha cobrado aún el 30% de la facturación global correspondiente al 2011.

El plan de pago a los proveedores del Gobierno será “un balón de oxígeno” para que las empresas puedan mantener su estructura, indica Caballer, que asegura que en cincuenta años en el sector nunca se había vivido una situación como la actual. A su juicio, hay un exceso de importaciones de productos pirotécnicos.