El pleno de Moncofa acordó ayer esperar a los informes de los técnicos municipales para bajar el IBI de urbana y rústica, el impuesto de circulación y la tasa de basuras para los comercios que le pide la oposición. El alcalde, Jaime Picher, insistió en la necesidad de que se estudie si son viables para la estabilidad presupuestaria del municipio, “porque el consistorio tiene unos gastos fijos y, antes de votar, hay que saber si nos lo podemos permitir”. Además, añadió que, si los documentos resultan favorables, votarán “a favor durante la próxima sesión”.

El concejal del PP José María Andrés aseguró que los trabajos “no están ya acabados porque no se ha querido”, pero lo que es innegociable es que en octubre volverán “a presentar estas mociones, estén los informes o no”. Según resaltó el edil popular, “la última palabra la tiene el pleno, y el ejercicio pasado se aprobó la bajada del IBI -con los votos a favor de PP y Bloc-Compromís- y no ha pasado nada”.

Asimismo, la corporación decidió denunciar a Bankia por la cancelación de los avales de 1,3 millones de euros de la empresa urbanizadora Piscivall. Por su parte, el alcalde anunció que destinarán 40.000 euros de una partida destinada al fomento del empleo que no se ha tenido que utilizar para contratar a un total de 23 ciudadanos dentro de un plan de ocupación. H