El dispositivo especial de la Policía Local para la vigilancia de las playas en verano se ha reforzado este año con la adquisición de una bicicleta más, por lo que ya son dos con las que los agentes podrán patrullar el municipio costero, con una prioridad clara “prevenir que suceda cualquier incidente y intentar garantizar una convivencia tranquila”, tal y como ha asegurado el concejal de Seguridad Ciudadana, Alejandro Borrás.

Para poder desarrollar esta labor la Policía Local contará con la colaboración, ya habitual, de Cruz Roja que asume la vigilancia de la costa, así como con la de Protección Civil “que reforzará los dispositivos de vigilancia y prevención en todos los actos que se organicen a lo largo del verano, y además también realizarán servicios diarios por las tardes”.

En definitiva, para el Ayuntamiento “la presencia policial debe servir para garantizar la seguridad y la tranquilidad de los vecinos, pero también para informarles de cuáles son los comportamientos adecuados dentro de las leyes y normas de convivencia”.

Borrás ha recordado que la creación de la unidad de policía en bicicleta buscaba, principalmente, facilitar la vigilancia de la playa “pero acercar más a los agentes a los vecinos”, dado que por las características de circulación en estos vehículos, los policías pueden acceder a primera línea de playa con mayor rapidez, pero además, por las características del poblado marítimo, también pueden atender con más agilidad los requerimientos ciudadanos.