La gran afluencia de gente, durante toda la mañana de ayer, refrendó la decisión del Ayuntamiento de Nules de reeditar el mercado de Mascarell, después de una primera experiencia fallida, «por razones de solvencia, probadas y justificadas», según el concejal de Comercio, César Estañol. Algo que llevó al equipo de gobierno a apostar por «otro modelo de gestión, la pública», para una actividad que se estrenó con éxito.

Más de 100 puestos de venta, a la espera de que puedan llegar a un máximo de 120, con gran variedad de productos, atrajo a numeroso público de municipios de la zona, que durante toda la mañana se paseó por la nueva ubicación, pegada al casco urbano amurallado, con lo que, como explicó el edil, se consigue «una mayor promoción del pueblo».

ESTUDIO DE POSIBILIDADES / Fue un día en el que se concretaron meses de trabajo. «Estudiamos mucho la ubicación y la legalidad, porque nuestra intención siempre fue no descuidar ningún detalle, dado que poner en marcha una actividad así tiene muchas implicaciones», dijo el concejal. Además, apuestan por un proyecto que tenga continuidad.

Para ello, Estañol precisó que se decantaron por una gestión pública, con el establecimiento de una tasa similar a la que pueda existir en cualquier otro mercado del municipio, con la diferencia de confiar la coordinación a profesionales que lo gestionen y asesoren para que funcione de la mejor manera posible. «Sobre todo, atendiendo a la singularidad de una propuesta que tiene que ser compatible con otras con similitudes», tal y como apuntó.

Que sea el Ayuntamiento el que lo organice supone asumir una serie de gastos adicionales, como la limpieza o la instalación de aseos públicos, que para el representante municipal, «se verán compensados por la promoción que supone para Mascarell, ya que actividad atrae actividad».

ACOGIDA // Para los vecinos de la pedanía, lo más gratificante no es solo ver el mercado abierto de nuevo, esta vez más cerca de las murallas, sino que además vuelvan a encontrarse caras desconocidas por la calle, porque eso quiere decir que «se revitaliza el pueblo». Así se expresó el alcalde pedáneo, Felipe Sánchez, quien destacó la «buena distribución» de los puestos de venta y la animación que se pudo disfrutar.

El cierre del anterior modelo fue recibido como una mala noticia por el propio Sánchez, quien adquirió, junto al consistorio, el compromiso por hacer todo lo posible para reabrirlo. Por esta razón, la jornada «fue importante a nivel personal», aunque quiso remarcar que «si estoy satisfecho no es por un interés propio, sino porque, que haya mercado, le interesa a Mascarell».