Cáritas Interparroquial de la Vall d’Uixó ha recibido la confirmación de que recibirá un envío de 18.000 kilos de alimentos para repartir entre los más necesitados. Según Valentín Font, miembro de la comisión permanente de la entidad y uno de los encargados de la gestión de las entregas, esperan “mantener la cantidad del ejercicio pasado, puesto que la situación económica de muchas familias no ha mejorado sino que ha empeorado”.

Así, en el 2011 Cáritas atendió a más de 700 unidades familiares que, de media, van “cada tres semanas a por un lote compuesto por leche, pasta, tomate frito, caldo envasado, galletas y arroz”, apunta Font. Pero, en este ejercicio, la crisis también pasa factura a la entidad y más adelante recibirán “bolsas más básicas, que incluirán leche, pasta y galletas, aunque desde la Unión Europea se están replanteando ampliar los productos”, ya que les han trasladado cuál es la situación.

“Cada año solemos recibir cuatro envíos de alimentos no perecederos, pero la distribución es desigual y hay que hacer un gran esfuerzo para poder atender a todas las personas que llegan, labor para la que son imprescindibles los voluntarios”, señala.

Cabe destacar que en los últimos años se ha experimentado un aumento notable de las peticiones de ayuda por parte de españoles, “personas que se han quedado sin trabajo y que ahora se ven ahogadas por la hipoteca y no tienen para el día a día”, apuntan desde la entidad.