Los vinos de nueve bodegas de la provincia se sirven estos días en el Mesón del Vino. Caldos de la tierra con el sello de la Indicación Geográfica Protegida (IGP), organizadora del evento, con la colaboración del periódico Mediterráneo. Benlloch, Viver, Les Useres, Almedíjar, Cabanes y Villahermosa aportan sus variedades. Tintos, rosados, espumosos, blancos o en barrica. Todo ello acompañado por las tapas que se pueden adquirir en las casetas de Castelló, ruta de sabor, a cargo de Cafetería Amado, que regenta los dos puestos gastronómicos, que son una de las principales novedades de esta edición del Mesón del Vino. Los tíquets para la comida cuestan 3,5 euros y se pueden consumir tapas calientes y frías, de jamón, quesos, ensaladilla o patatas, entre otras variedades.

El recinto está ubicado en la plaza Antonio Ferrandis, junto a la biblioteca pública de Rafalafena. Una zona que, con la cita vitivinícola, se convierte en uno de los epicentros de estas fiestas de la Magdalena, sobre todo para los amantes del buen vino, en especial del creado en la provincia, como es el que se sirve.

A destacar la zona infantil que se ha habilitado dentro de la carpa, donde hay mesas y sillas para que los más pequeños se distraigan mientras los padres degustan los mejores caldos. También son idóneas las mesas exteriores, para disfrutar de un buen vino.

El popular Mesón del Vino permanecerá abierto durante toda la semana en un horario que abarca desde las 11.00 horas hasta entrada la medianoche.