En la ermita de Santa María Magdalena, el solar de nuestros mayores. La Federació de Colles recibió ayer el título de Ermità de l’Any 2018 recogiendo el testigo de la Gestora de Gaiates. El concejal de Ermitas, Enric Porcar, entregó al presidente del máximo órgano intercollas, Pepe Beltrán, las llaves del medieval oratorio que lleva la advocación de la santa penitente.

Beltrán mostró su satisfacción por este reconocimiento ya que la Federació de Colles «es un colectivo que trabaja por las fiestas, ya no solamente durante la semana de la Magdalena, sino a lo largo de todo un año». Pero, además, la entrega de las llaves de la ermita secular del Castell Vell, en el 2018, tiene toda una simbología, ya que la federación «cumple este año sus bodas de plata».

Y, si fue Porcar quien entregó la llave, ejercieron de padrinos en la ceremonia el concejal de Normalización, Ignasi Garcia, y la concejala de Cultura y portavoz municipal, Verònica Ruiz. Cultura, fiestas, tradición y ermitas, palabras claves a menos de 15 días para el inicio de la semana grande de la ciudad, que tuvo ayer su prólogo mas ceremonioso, su protocolo más legendario y la puesta en valor de este tesoro sentimental y emocional que dignifica al ermita de la Magdalena.

Y una Federació de Colles que estrenará el miércoles de las fiestas de la Magdalena su primer desfile de animación «con los carros engalanados y la participación de 1.800 miembros de las collas castellonenses», como se encargaba de recordar Pepe Beltrán, consciente del protagonismo in crescendo que toman estos colectivos festeros.