Pere Ribera ha sido elegido este año para ilustrar la portada del especial de Magdalena de Mediterráneo. Todo un reto para el artista de la Vall d’Uixó que se muestra orgulloso ante tal reconocimiento.
--¿Qué elementos has querido reflejar en la obra que ilustra este año la portada del especial de Magdalena de ‘Mediterráneo’?
-Habiendo hecho antes otras portadas y obras relativas tratas de no repetir lo que ya has hecho, aunque la iconografía de la Magdalena, si bien es muy significativa, también está muy explicada. Entonces, lo que hice fue centrarme en la imagen del gaiato, que siempre me ha atraído por muchos motivos, algunos de ellos personales, como su significado o simbolismo de servir de apoyo en la última parte de la nuestra vida.
--Una imagen muy gráfica la del gaiato, es cierto.
-Así es. Y para darle forma, pensé en la esencia de la fiesta, en la luz, con ese farolillo que llevaban los romeros por la noche al bajar de la ermita. Así pues, estos dos elementos son primordiales: el gaiato y el farolillo.
--Un farolillo que tiene algo de particular, ¿no?
-He hecho un farolillo actual y barroco, como son las propias gaiatas, que se han convertido en elementos muy recargados, como es la iconografía mediterránea. Lo importante de la obra, el detalle, es que en este farolillo, lo que genera la luz no es una mecha, sino la propia Magdalena, la ermita. Digamos que es el foco de la luz.
--El foco de la luz que ilumina el camino en esta procesión...
-Todo ello rodeado de las cañas, sí, que realmente es lo que llena la vista el día de la Romería. Este ejército de cañas que rodean el recorrido que se tiñe de verde evidentemente, un verde que ya está implícito en la bandera de la ciudad y que también encontramos en las propias cañas y en las cintas que las coronan. El verde es casi obligatorio que esté en la iconografía.
