No hay fórmula que convenza a más castellonenses durante la Magdalena. Y es que cuando se mezclan la mejor comida y las rubias más gustosas, el éxito en Castellón está garantizado. Eso, y de alta calidad, es precisamente lo que ofrece el XVIII Mesón de la Tapa y la Cerveza, convertido ya en un auténtico clásico de las fiestas y consolidado en su actual ubicación en el parque Ribalta.

Grupos de compañeros de trabajo, amigos, vecinos y familiares copan las mesas y degustan raciones de todo tipo. Los hay más clásicos, que piden patatas bravas, bocadillos de carne a la brasa, calamares o croquetas. La oferta, sin embargo, tiene opciones para atraer a todos los comensales y, entre ellos, también a los jóvenes, que hacen cola para comprar hamburguesas, delicias de pollo y kebabs. Y, como no podía ser de otra forma, los arroces no faltan en todas sus formas. Los establecimientos cocinan apetitosos arroces negros, paellas, fideuà, arroces de marisco y los risottos italianos.

Las veinte casetas gastronómicas ponen el turbo en la recta final de las fiestas de la Magdalena y tras siete días de éxitos. El mesón, con sello del periódico Mediterráneo, tendrá sus puertas abiertas de 12.00 a 16.30 horas y de 19.00 hasta la medianoche. El domingo será la jornada final y el horario ese día concluirá a las 22.00 horas. Hasta entonces, queda Magdalena para disfrutar.