Marina Redó Fortanet (Castellón, 1994) será proclamada esta noche sobre los tapices medievales del escenario del Teatro Principal como LXII Na Violant d’Hongria de la Germandat dels Cavallers de la Conquesta. Lo hará de la mano del prohom, Luis Oria, que le entregará la rosa caballeresca, en un acto altamente protocolario y con el que Castellón regresa al medievo por una noche, y en el que actuará como mantenedor el director del periódico Mediterráneo, José Luis Valencia.

Será una ceremonia de antorchas y tambores, de escudos de armas y cavallers con sus blasones. Una gala llena «de emoción», señala la propia Na Violant. En la mitad de un camino que empezó el pasado verano, con su nombramiento, y llega hoy viernes a la baldosa escrita en letras de oro de su memoria el coliseo de La Paz, para elevarse al cielo de la festa en la semana grande de las fiestas de Castellón, como reina dels Cavallers de la Conquesta y dama de la ciudad en la corte de la reina de la Magdalena para el 2017, Estefanía Climent.

Días intensos los recorridos en las últimas semanas por Marina Redó Fortanet y sus dones. A sus estudios de último año de Derecho y su trabajo en un despacho de la capital, donde está haciendo las prácticas, se suman las citas con el món fester y con Amparo Pitarch, consagrada indumentarista, que firma su traje de reina magiar. «Será un vestido muy clásico, pero contemporáneo, sin lujos ni ostentaciones, con ideas de Amparo y mías, que hemos conjugado en un traje que, para mí, es precioso», dijo. «Y hasta aquí puedo leer, porque debe ser una sorpresa», enfatizó.

Un traje para la historia

Las Cròniques de Cavallers y volúmenes antiguos han servido para conformar el universo de Marina Redó en nombre de la reina húngara, junto a «fotos antiguas de las reinas Na Violant de décadas pasadas, en las que todo era más sencillo, más tradicional».

Apasionada del mundo de la moda --con un blog propio--, y seguidora de las tendencias más actuales, Marina Redó ha tenido claro «desde el principio» cómo «será el traje», cómo le «gustaría representar a la esposa del rey Jaume I, teniendo en cuenta su época, el contexto histórico y adaptarlo a la contemporaneidad para un cargo en pleno siglo XXI», señala la máxima representante del ente vinculado a las fiestas de la Magdalena.

Vinculada a la ‘festa’

De pequeña, en la Colla del Rei Barbut, de la que su padre es socio decano; y de la gaiata 18, Crèmor, en sus días de festera infantil, donde fue madrina en el 2006, a la comisión de la gaiata 1, Brancal de la Ciutat, donde se estrenó con madrinazgo mayor. Conoce la fiesta, la disfruta y la estima. «En casa siempre hemos estado vinculados de una manera u otra a las fiestas de Castellón y este año, más. Fue una sorpresa que ha desembocado en una enorme ilusión y un mayor honor», manifiesta la joven.

Y, a su lado, sus padres, Héctor Redó e Inmaculada Fortanet, la han animado «hasta el infinito y más» para que cumpliera uno de sus sueños, acompañándola en el camino que la llevó desde su nombramiento, el pasado verano, hasta la gala de proclamación de esta noche, donde se elevará al trono de la Germandat dels Cavallers de la Conquesta.

Estudiando la historia

Como sus antecesoras y haciendo gala del poderío magiar que representa, tomando el nombre de una de las mujeres más empoderadas del medievo de la mano de su marido, el rei En Jaume I El Conqueridor, Marina ha querido «saber más, conocer a la reina Violant, que fue muy importante para su época».

Ella ha sabido formar su propia historia, además, junto a sus dones, Ana Goterris, como Na Dolça; Ana Sánchez, como Na Enmengarda; María Soriano, como Na Eva; Estefanía Gonell, como Na Margarida; Andrea Sánchez, como Na Provençala; y Ana Ortuño, como Na Rama.

Las seis la acompañan ya en su aventura y la llevarán de la mano hacia la semana grande de Castellón. Son una piña y «compañeras para toda la vida». «Tengo muchas ganas de verlas con sus trajes de dona y que desfilemos las siete juntas hacia el Teatro Principal. Será emocionante», dijo la joven reina de Cavallers.

Con ellas está «viviendo un sueño», el que le llevaba, de pequeña, a sentarse para ver en el Pregó de la Magdalena la carroza de la Germandat; o a esperar en la avenida del Rei a que empezara el Homenatge al Rei. Dos de los actos más esperados de una Magdalena 2017, junto con el Homenatge a Na Violant, para los que ya cuenta los días. «¿Nerviosa? Un poco, y más cuando más se acerca la proclamación, con las felicitaciones vía WhatsApp, los ánimos de la familia, de los amigos, de los compañeros… Pero esperando a la semana grande, que ya queda menos», apostilla.

En primera fila

Desde hoy, ya hasta el 18 de marzo, Marina Redó estará «en primera fila festera» y es «consciente» de ello, pues sabe que «no es lo mismo vivirlo como madrina de un sector». «Será diferente», señaló, poniendo el acento en que «la ilusión máxima» que tiene y ver cómo le arropan «desde la Germandat, las dones, el Cabildo, la Esquadra; es increíble», dice. «Quiero disfrutar de cada acto, de cada toque de corneta y tambor, de cada paso como reina Violant de la Germandat dels Cavallers de la Conquesta, en los propios actos». Esta noche será oficial. Marina Redó entrará en la historia del ente y en los anales de sus Cròniques.