Escribió Mario Benedetti que el diálogo entre las diferencias era la única forma de prolongar las relaciones. Y ayer mismo el Gobierno Provincial dimos una nueva muestra de que el diálogo, la escucha activa y el consenso son nuestras herramientas de gestión, nuestra forma de ser. De la misma forma que el mar Mediterráneo ha sido testigo de historias de acuerdos y de paz, nuestra voluntad es la de aunar para que Castellón siga siendo la tierra en la que pasan las cosas buenas.

Hace seis años nació el firme compromiso de celebrar de forma bianual la Cumbre de Alcaldes para sumar la voz de los 135 municipios que conforman Castellón. Hace seis años en Cabanes establecimos el compromiso de que el Gobierno Provincial fuera una Administración más moderna, abierta, participativa y útil. Y hoy, seis años después, lo hemos logrado. Pero seguimos trabajando en ello todos los días.

Hemos conseguido desde la Diputación ser, más que nunca, un ayuntamiento de ayuntamientos. Y prueba de ello es el Plan Castellón 135, un hito de este Gobierno ya que supone la mayor inversión de la historia para la provincia y nace con la unanimidad de todos los grupos políticos y, sobre todo, lo más importante: permite a cada pueblo a tener la oportunidad de elegir su futuro.

No descubro nada nuevo si digo que soy un municipalista convencido y que desde un punto de vista liberal estamos impulsando un proyecto político para Castellón. Un proyecto que cuenta con cuatro ejes: liderar el desarrollo económico de nuestros pueblos, igualar las oportunidades de todos los rincones de esta tierra, defender a Castellón y sus 135 identidades y, por último, mejorar la eficiencia y la transparencia de esta institución.

Castellón tiene grandes retos por delante. Y el primero es, sin lugar a dudas, la creación de empleo. Hemos logrado una histórica reducción del desempleo pero debemos seguir luchando para, con políticas eficaces, crear más oportunidades. El segundo gran reto de Castellón es, sin lugar a dudas, frenar la despoblación del interior y por eso ayer mismo anuncié la puesta en marcha de una Cumbre contra la Despoblación Rural que concretaremos en los próximos meses.

Y, por supuesto, debemos seguir reivindicando por lograr nuestras infraestructuras. Solo si estamos mejor conectados podremos conseguir mejores resultados entre todos. No pedimos más de lo que nos merecemos y que le corresponde a Castellón. Todo ello acompañado del fuerte compromiso municipalista, de la necesidad de dotar de mayor financiación a los ayuntamientos para que estos presten los mejores servicios.

Nuevos retos, consolidar un modelo de crecimiento y oportunidades, más cercanía y más territorio. Más Castellón es lo que queremos desde el Gobierno Provincial.

*Presidente de la Diputación de Castellón