Por mucho que el Gobierno de Sánchez haya colgado el cartel de cerrado por vacaciones, España no se detiene. Sin pudor alguno, presidente y ministros llevan un par de semanas de asueto, de ausencia, y poco o nada sabemos de ellos. Han llegado al gobierno agotados. Les resulta totalmente indiferente el hecho de que España no se detenga como ellos.

Tal actitud totalmente irresponsable, les ha llevado incluso a no dar la cara ni ponerse al lado de quienes sí la daban para evitar que las llamas devoraban Llutxent y Gandia. Nunca pensé que un gobierno llegara a ningunear de forma tan burda a los españoles.

Mientras cientos de inmigrantes siguen llegando a nuestras costas, con una crisis migratoria fuera de control, mientras sufrimos un incendio con consecuencias materiales y medioambientales devastadoras, el Gobierno de Sánchez de vacaciones y sin dar respuestas. Un gobierno ha de estar permanentemente al lado de quienes lo requieran, porque en la gestión de un país y de sus necesidades no hay vacaciones.

En contraposición, en el Partido Popular, con Pablo Casado al frente, seguimos al lado de quienes nos necesitan, al lado de los alcaldes desbordados por la crisis migratoria, al lado de los propios inmigrantes, al lado de quienes han perdido sus casas, sus propiedades o su medio natural.

Y no solo eso, hemos planteado también propuestas, como la de pedir al Gobierno a través del grupo popular del Senado, que declare de forma urgente como zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil, el territorio afectado por el incendio de Llutxent, y agilizar la concesión de las ayudas económicas y materiales necesarias. El Gobierno, mientras tanto, sigue cerrado por vacaciones.

*Senadora por Castellón del grupo parlamentario popular