Demografía, la tasa bruta de natalidad o tasa de natalidad, es una medida de cuantificación de la fecundidad que refiere a la relación que existe entre el número de nacimientos ocurridos en un cierto periodo y la cantidad total de efectivos del mismo periodo. El lapso es casi siempre un año, y se puede leer como el número de nacimientos de una población por cada mil habitantes en un año.

Tiene la ventaja de ser una medida sencilla y fácil de interpretar, pero adolece de algunas dificultades, pues en la comparación entre países puede arrojar diferencias que dependen más de la estructura por edad y sexo de la población que de la fecundidad de las poblaciones analizadas.

El crecimiento natural (o vegetativo), en cambio, es la diferencia entre el número de nacimientos y el número de defunciones de una población. Si el número de nacimientos es superior al número de muertes se dice que la tasa de natalidad es mayor a la de mortalidad, es decir que la población de un lugar en concreto aumenta. H