Si hay algo más duro para una familia que perder una vivienda, es que algún político de turno genere falsas expectativas. Y eso es lo que ha hecho Ara Benicàssim en su propuesta sobre desahucios.
Desgranemos. En primer lugar, manipula las cifras que utiliza en su exposición de motivos a su antojo para justificar sus argumentos. Habla de incrementos de casos, cuando la realidad es que van a la baja. En el primer semestre de 2015, el número de ejecuciones hipotecarias ha descendido casi un 25%, en contra de los que afirma la marca blanca de Podemos. También deja a las claras su incapacidad política de gestión al proponer iniciativas ilegales, como la exención de impuestos.
Quienes como Podemos, lanzan brindis al sol a cuenta de los que sufren, no merecen tener responsabilidades políticas ante la gente, porque no defienden sus derechos sino sus siglas.
Benicàssim quiere ser una ciudad libre de desahucios, pero con hechos. Crearemos una comisión de trabajo que evalúe la situación actual y proponga medidas ejecutables; conveniaremos con el colegio de abogados la asistencia jurídica a los casos que surjan y mediaremos ante las entidades que sea necesario para salvaguardar la dignidad de nuestros ciudadanos. Trabajaremos y cumpliremos, como hace el PP, y no prometeremos y engañaremos como hacer la izquierda bolivariana. H
*Alcaldesa de Benicàssim
