Si no los puedes convencer, confúndelos. Así se comportan los malos gobiernos más preocupados en buscar culpables que en hallar soluciones.

Ese es el Partido Popular castellonense. Ignoraré el glosario de insultos que nos propinó en esta misma sección un enviado -uno más- cuyo artículo no merece mayor comentario.

Veamos. Unas teclas de distancia para recordar la verdad. Pulsando tranquilamente el teclado del ordenador la historia regresa presta y certera para ubicar a cada uno en su sitio.

Ejercicio práctico número uno. Si algunos han perdido la memoria, Google, no. Por ejemplo, ¿qué opinaba del proyecto Castor el conseller competente del PP en el Gobierno valenciano? Pulsemos en el buscador: Mario Flores y proyecto Castor: “Es de vital importancia en la planificación energética de la Comunitat, ya que garantizará un suministro limpio, seguro y de calidad, al tiempo que favorecerá la estabilidad de los precios del gas… del mismo modo proyectos como el Castor sirven para impulsar y planificar infraestructuras energéticas necesarias que permitan a la sociedad disponer de un suministro de calidad… en octubre de 2008 la mercantil Escal UGS (Florentino Pérez) solicitó la ocupación… por ello la Conselleria de Infraestructuras y Transportes ha hecho un gran esfuerzo… a los requerimientos del proyecto Castor…”. Conclusión: devota sumisión de la Generalitat del PP. Hay más.

Vayamos a un segundo ejercicio práctico. Pulsemos en el buscador: Carlos Fabra (padre político y hacedor de todos los que ahora no se acuerdan de nada) y proyecto Castor: “Destaco los beneficios que aportará la infraestructura sobre el tejido industrial. Estamos en una provincia que es la principal consumidora de gas de España por la industria cerámica, por lo que parecería una incongruencia que nos opusiéremos a este proyecto…”. Más certezas empíricas. El minuto uno del proyecto se sitúa en un prematuro decreto de Aznar en septiembre de 1996 y culmina con la licencia de actividad otorgada por el alcalde del PP de Vinaròs en diciembre del 2011, amén de su apoteósica inclusión en el Plan autonómico de Infraestructuras Estratégicas.Y sí, la Administración central socialista también formó parte del iter administrativo registrado durante tantos años.

Pero el tema grave es otro. El dichoso proyecto no inspira. Y punto. Algo ha salido muy mal y la política en mayúsculas debe resolverlo. Lo primero son las personas. Así que, señores del PP, menos amenazas y ejerzan, puesto que ahora lo gobiernan todo. Ejerzan, porque, además, tienen nuestro apoyo para llegar hasta el final. H

*Secretario general provincial del PSPV-PSOE portavoz en la Diputación de Castellón