¿Quién no tiene whatsapp? Ya es raro, se priva de un adelanto más en la escalada tecnológica que además es gratis, y de enterarse de lo que se cuece en su entorno social, y si no, es un individualista, un antitecnológico o un friqui marginado. Hoy todo se organiza a través de los grupos. Familia, es el que todos tienen y si no deberían tenerlo. Supone una comunicación simultánea entre todos sus miembros que de otro modo sería difícil y cuando algunos están fuera se agradece.
Otros resultan muy útiles para organizar una actividad: viaje, cena o fiesta y pasada la misma sirve para colgar fotos. Los hay de grupos de interés: club, actividad o simplemente amistad y al fin están los disparatados y peor los pesados, donde te meten sin saber porque ni como, con gente hiperactiva que se dedica a mandar tonterías o guarradas, con un vip vip constante que molesta a cualquier hora del día y de la noche. Darte de baja, si puedes, queda mal, y podría ofender, pero en ocasiones no hay más remedio.
No siempre es interesante lo que haces, lo que dices, lo que piensas, donde estás, o lo que vas a hacer, es más la mayoría de las veces no le importa a nadie. Así que al poner algo, procura que sea útil o al menos con interés general, pero recordar que siempre es mejor comunicarse en persona que por aparatos. H
*Notario
