Desde hace ya unos años, los vecinos de la Marjaleria tenemos un sentimiento de abandono y de discriminación con el resto de los vecinos de Castellón por parte de nuestro Ayuntamiento. Un sentimiento que no se ciñe únicamente al fuero interno, que también, sino que se siente día a día al salir de nuestras casas y pisar la calle. Una calle que día que pasa, día que está más sucia; calle que día que pasa está mas abandonada y calle que cada día que pasa tus vecinos te recuerdan que también pagamos nuestros impuestos y que nuestro Ayuntamiento nos ha olvidado.

Todo esto lo puede ver cualquier persona que tenga el interés de pasar por nuestras calles y caminos, puesto que están más sucios con el paso del tiempo, cosa que en el resto de nuestra ciudad no ocurre, pues para todos los vecinos de Castellón, a excepción de los de la Marjaleria, existe un servicio de limpieza en las calles que regularmente las limpian de la suciedad que se genera. Aquí si está limpio es porque nosotros mismos las limpiamos.

Calles y caminos que están cada día más estrechos debido a las hiervas que crecen en ellas. Tampoco se limpian y poco a poco hacen desaparecer el suelo, lo que produce, aparte de la sensación de abandono y tercermundismo, que paulatinamente se vayan comiendo el camino haciéndolo más angosto, con el riesgo que eso significa para todos los que los usamos.

También tenemos, como en otras partes de nuestra ciudad, viviendas abandonadas y, en ocasiones, en situación de grave ruina, con el peligro que eso significa para los vecinos y paseantes, con la diferencia que en la Marjaleria no se actúa como en el resto de la ciudad para evitar riesgos. Añadimos, además, que pasan días en los que no te cruzas una sola patrulla de policía, ni Policía Nacional ni Policía Local. Día a día vemos cómo aumentan las fincas abandonadas con grandes matorrales en las que periódicamente se producen graves incendios que ponen en peligro las viviendas y a la gente que en ellas viven, sin mencionar a los bomberos y policías que en ocasiones arriesgan sus vidas para apagarlos.

EN LA MARJALERIA, aparte de problemas urbanísticos, que los tenemos, y muy graves, también tenemos otros problemas como los arriba dichos y otros más, pero eso parece no importar a nadie a excepción de los que vivimos aquí. Todo esto desde la asociación de vecinos Plana Entrilles se ha pedido solución hace años al Ayuntamiento, que es quien debe poner solución, y se ha pedido tanto por escrito como de palabra a sus responsables políticos, e incluso se le ha llevado a que vean las cosas en persona, pero de nada ha servido, estamos igual o peor, pues el tiempo transcurrido, lejos de solucionar nuestros problemas, los está empeorando.

Ni se han reparado los caminos, ni se han limpiado, ni se ha solucionado el problema de las casas en ruinas, ni se ha creado una ordenanza de solares tantas veces solicitada para evitar los incendios y demás problemas de salubridad que crean. Los vecinos de la Marjaleria tenemos la impresión, por no decir la certeza, que nuestro dinero no tiene el mismo valor que el dinero del resto de vecinos de Castellón: pagamos religiosamente todos los impuestos que el Ayuntamiento nos quiere cobrar, como el resto de los de los vecinos de la ciudad, pero no recibimos los mismos servicios, prestaciones ni inversiones que tienen en el resto de la ciudad.

Tenemos la sensación de que estamos olvidados y últimamente solo se acuerdan cuando se acercan las elecciones o ahora cuando hablan del gran proyecto del nuevo Plan General, y de lo bien y bonito que nos lo van a dejar todo, cosa que aún está por ver y analizar, cosa que no quepa ninguna duda haremos en detalle. Pues bien, no solo de grandes proyectos vive el hombre, necesitamos pequeñas y grandes cosas en el día a día para vivir con normalidad, que demuestre que somos ciudadanos de primera y no de tercera como algunos quieren hacernos creer ante el olvido y abandono que estamos sufriendo.

*Presidente de la asociación de vecinos Plana Entrilles