El pleno del Ayuntamiento de Almassora se reunirá mañana en sesión extraordinaria para aprobar dos modificaciones de créditos. Este cambio nos permitirá sacar adelante proyectos tan importantes como la tercera fase de las obras de la calle San Jaime o la adecuación del Espai Mercat como Museu del Joguet permanente y sala de exposiciones. Cierto. Pero con esta modificación presupuestaria cumpliremos también la imposición del Gobierno de España de amortizar 923.000 euros de deuda. De deuda heredada, claro está.

Prueba de ello es que en breve hará dos años que gobernamos en Almassora y no hemos recurrido al crédito en ningún momento ni tenemos previsto hacerlo. Los compromisos que contrajo el PP con los bancos durante su tiempo al frente del consistorio todavía arrastran sus deudas y sus intereses. Una deuda que el ministro Montoro nos obliga a amortizar a pesar de que nuestras cuentas están perfectamente saneadas, somos uno de los ayuntamientos que paga a sus proveedores más rápido y hemos demostrado que nuestra gestión económica se aleja mucho de esa ruina que vaticinaba la oposición.

Por ello nos indigna que el Ministerio de Hacienda tenga que determinar el futuro de Almassora, de sus vecinos y de sus proyectos. Pagar 923.000 euros a los bancos supone dejar de invertir en nuestra ciudad. Por si fuera poco, a esta circunstancia se suma a la prohibición del Gobierno central de contratar a más personal en la Administración. Almassora crece pero no su plantilla municipal, por lo que la atención que podemos prestar a nuestros ciudadanos no es, ni mucho menos, la que nos gustaría.

Señor Montoro, el Ayuntamiento de Almassora no está gestionado por niños ni a base de impulsos. La situación económico-financiera de nuestras arcas públicas merece nuestra reflexión y la tiene, por lo que condicionar su evolución priorizando el beneficio de las entidades bancarias dice muy poco de un país que ha pagado muy cara la crisis inmobiliaria. Es tiempo de pensar más en las necesidades que están al cabo de la calle, no en los despachos que nos distancian de la realidad.

*Primera teniente alcalde Almassora