Cada día me sorprendo más al leer los contenidos de los artículos publicados en los medios periodísticos tanto españoles como extranjeros. Las críticas arrecian sobre los acontecimientos en nuestro país que no por menos dolorosos para los españoles, dejan de ser más atractivos para la prensa sensacionalista, por aquello del morbo, y, de forma más discreta, para los medios de comunicación más serios, dependiendo del grado de afinidad política y simpatía social con nuestro país.

Hechos como la tradicional cultura española de poseer la vivienda habitual y eventualmente la vacacional, ha sido motivo de comentarios en medios de comunicación europeos, algunos con un análisis adecuado de las razones existentes y otros voceando a los cuatro vientos que España ha dejado de ser el décimo país de la Unión Europea por el número de viviendas en propiedad, lo cual ha sido algo prioritario por tradición. Sin embargo, y debido a las circunstancias económicas, sociales, políticas y laborales, el alquiler es la fórmula preferida en la actualidad para poder, mal que bien, tener un techo, sin sufrir la presión de la hipoteca por ir al día en las cuotas o liquidarla, que, según parece es el sueño dorado de todos los afectados y más, si cabe, del gobernador del Banco de España. Y es que tener propiedades, hoy en día en España, no siendo fuertes económicamente, es un lastre debido a varias razones, pero sobre todo a los impuestos de los distintos organismos y las leyes reguladoras de la transmisión de la propiedad, por venta, herencia o donación.

Por otra parte, en nuestro país, es preferible no heredar pues, de no ser grandes fortunas, o se acepta a beneficio de inventario o se rechaza. Además, si el tema lo sazonamos con la inseguridad laboral o las pensiones, pues ya me dirán ustedes...

*PSPV-PSOE Castellón