Hoy hace una semana y aún resuenan en las comunidades educativas de los colegios Santa Quitèria y Embajador Beltrán el «no» de PP Almassora, Ciudadanos y el concejal Sergio Manrique a asumir las competencias para construir esos centros. O, lo que es lo mismo, su rechazo a las obras en 2019 a través de la abstención en el pleno del viernes. De hecho, de no ser por los votos favorables del equipo de gobierno y Se Puede, diríamos adiós al plan Edificant al que, por cierto, nos adherimos en noviembre, como tantos ayuntamientos de la Comunitat. Si es por fastidiar, no les importa cambiar de criterio a pesar del dolor que ha generado en las familias enterarse por el pleno del (sin)sentido de su voto.
Han intentado explicar a las AMPA, docentes y dirección que se niegan ahora a mantener la línea aprobada en noviembre porque se acogen a la hipótesis de que el Ayuntamiento tenga que enfrentarse en el futuro a un supuesto (que jamás se ha producido) sobrecoste de los trabajos. Entenderán que nunca un colegio que salga a licitación se financiará con más dinero del que aparece en el presupuesto inicial, que para eso sale a concurso público y abre la puja a la baja de las empresas interesadas. Han intentado explicarse, pero los brazos caídos ante mi pregunta «¿votos a favor?» hablan por sí solos.
Quieren alquilar más barracones por más años, que este equipo de gobierno no saque adelante ningún colegio y, a costa de centenares de alumnos, decir que no hemos hecho nada. Se equivocan: heredamos de su gobierno ser el municipio de la provincia con más barracones, los consejos escolares se volcaron con Edificant, Conselleria nos cede el dinero necesario a cambio de ocuparnos de la tramitación para aligerar plazos y no vamos a renunciar a las obras que el PP olvidó durante 12 años.
Es la única forma de que no se repita un caso como el del Regina Violant, que no puede integrarse en Edificant ya que su procedimiento ya estaba en marcha cuando se aprobó el plan. Si creen que no quiero ver acabada la parte de la obra que resta, es mentira. Ningún alcalde prefiere niños en barracones y familias enfadadas. Se licitará pronto.
*Alcaldesa de Almassora
