Que Burriana estos días anda en boca de todos no es noticia. Lo triste es que lo sea por la fuga de una vaca que 15 días después sigue en paradero desconocido. Ni el festival Arenal Sound logró nunca situar a nuestra ciudad en tan altas cotas de difusión. Cuando creíamos que lo habíamos visto todo, los miembros del tripartito nos volvieron a sorprender. Han conseguido que Burriana alcance el más alto grado de popularidad con el mayor ridículo.
Rebeca, como la han acuñado en redes sociales, es la metáfora de nuestro tripartito. El pacto de la vaca ha llevado a Madrid su gestión vergonzosa, la que hoy conoce desde un vecino de Vigo a uno de Sevilla o Guadalajara. Televisiones y emisoras a nivel nacional, tuits de la Guardia Civil o el Cuerpo Nacional de Policía, además de una comunidad en redes sociales que evidencia el ridículo de tres partidos políticos: PSPV, Compromís y Podemos.
Por más que empeñen sus energías los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, la Policía Local de Burriana, el Consorcio Provincial de Bomberos de la Diputación o los ganaderos implicados en las labores de búsqueda, cuando hay tres partidos descoordinados y desnortados los objetivos no se alcanzan.
Y en Burriana, los miembros de este pacto cuyo objetivo era calentar despacho han demostrado no solo a los vecinos, sino a toda España, que son incapaces siquiera de apresar una res. Es el fracaso palmario de unas políticas que se disfrazaron de sociales para dar la espalda al ciudadano. Las que llevamos denunciando desde hace más de dos años. Porque en Burriana no hay proyecto, ni objetivo, ni futuro para nuestra ciudad. Solo hay interés en ocupar el Ayuntamiento para garantizarse el pasto que les permita ser protagonistas. El mismo que ha logrado Rebeca.
*Portavoz del PP en Burriana
