La junta directiva de la AVV Raval Universitari leía con asombro y disgusto la reivindicación que el pasado 6 de febrero publicaba en este diario José Vicente Álvarez, presidente de la AVV El Saboner y miembro de Coasveca, bajo el título La pasarela de la integración. Esperábamos pacientes a hoy, día 20 de febrero para conocer la propuesta del Ayuntamiento sobre la pasarela entre nuestro barrio y la carretera de Alcora. Pero Álvarez y Coasveca han querido enseñarnos antes sus cartas respecto de una infraestructura de la cual los vecinos del Raval Universitari vamos a ser, de manera indiscutible, los principales afectados o beneficiados. ¡Una lástima el procedimiento empleado! Habría sido un signo de buena vecindad habernos reunido antes para escucharnos y entendernos, como hemos hecho recientemente con las asociaciones vecinales Crémor, San Josep del Riu Sec y Maset Blau.
Esperamos que el gobierno municipal no tome una decisión sobre esta polémica pasarela en contra de la voluntad mayoritaria de quienes somos los principales afectados y, sobre todo, en contra de los principios y valores por los que entendemos que conquistaron el poder local quienes hoy nos gobiernan. Queremos recordar que la conexión --única y exclusivamente ciclopeatonal-- que las asociaciones Raval Universitari y Maset Blau reclamamos desde hace más de tres años se va a convertir inevitablemente en un signo del modelo de ciudad que el actual gobierno municipal quiere para Castellón. Nuestros responsables políticos tendrán que decirnos con claridad si están dispuestos a reventar nuestro barrio por el sur, partiendo una zona verde, con más tráfico a motor, más emisiones tóxicas y más ruido, todo ello bien cerca de viviendas, comercios y aceras. En la calle José María Mulet Ortiz tenemos un claro precedente de lo que va a ocurrir en ese caso, por ello desde Raval Universitari nos resistimos a entrar en la lógica simplista, facilona y cortoplacista que justificaría una actuación así y que prioriza el transporte a motor siempre y por delante de cualquier otra forma de movilidad urbana.
La modernidad mal entendida empobrece la calidad de vida urbana, minusvalorando la movilidad peatonal y en bicicleta al supeditar siempre la organización y arquitectura urbanas al transporte a motor ¿Vamos a seguir igual en una ciudad con el potencial de la nuestra?
Con esta pasarela no nos jugamos la integración con el centro urbano, sino la integración en un nuevo modelo de ciudad y de ciudadanía: más sostenibles, de mejor relación con nuestro entorno medioambiental, más saludables y de mayor calidad de vida y, por ello, más humanos.
Construir un puente para vehículos a motor, apenas a 300 metros y 1 minuto en coche del puente concebido para el mismo fin en la Av. Vicente Sos Baynat, la vía rápida de acceso y travesía por nuestro barrio, vía de cuatro carriles más vía de servicio y medianas arboladas, nos parece injustificable, ni económicamente, ni urbanísticamente ni, por supuesto, ambientalmente. Entendemos que el Raval Universitari tiene conexiones con el casco urbano más que suficientes para el tráfico a motor con el puente de la Av. Vicente Sos Baynat y con los cercanos puentes del Siglo XXI y de la carretera de Borriol. Sin embargo, hay un déficit de metros de vial para peatones y ciclistas, de vías de comunicación ambientalmente más sanas y de espacios para la creatividad y la comunicación humanas. Todo ello es comprobable. Pero claro, nuestra propuesta responde a otro modelo de ciudad y cultura ciudadana, bien diferentes a las que venimos sufriendo durante décadas. Ahora tenemos la oportunidad de una verdadera integración, pero en una ciudad de futuro y no en una de pasado, y esperamos contar, al menos, con la inteligencia y valentía de quienes nos gobiernan y quienes aspiran a gobernarnos.
*Presidenta AVV Raval Universitari
