A falta de mes y medio para que acabe el año, en el ayuntamiento de Nules no se sabe nada de los presupuestos. Una vez más los que daban lecciones de seriedad y compromiso, demuestran que en la práctica no tienen ni idea de gestión y administración pública. No tenemos ninguna propuesta, ni un borrador, ni la más mínima idea de qué nos deparará el 2017 en manos del cuatripartito de los nueve concejales que son más amigos que concejales, aunque después se apuñalen por la espalda.

En el próximo año 2017 vamos a seguir con más de lo mismo, que es como decir que continuaremos en el limbo por la ausencia de proyecto político y lo que es peor, en el ostracismo. No existimos para ninguna administración y ya estamos empezando a pagar las consecuencias de la incapacidad del alcalde y sus amigos para reivindicar lo que nos corresponde.

En este ayuntamiento no existe la negociación. Si la conselleria dice que tenemos que pagar la redacción del Plan Especial de la Marjaleria, la pagamos sin rechistar, a pesar de que las competencias en materia urbanística, más si cabe por lo que respecta a una zona de especial protección, le corresponden única y exclusivamente al gobierno autonómico. Pero el alcalde y su equipo se encogen de hombros.

Lo más preocupante es que no negocian lo más básico, pero les prometen a los propietarios amenazados por órdenes de derribo que van a pedirle a la conselleria que paralice o disminuya las multas que están recibiendo. Lo hacen a pesar de que la Consellera ha dicho pública y claramente que las multas son las que son y no se van a tocar, porque se sentaría un precedente. Parecen moscas dándose contra un cristal. Se han resignado a acatar lo que venga porque son incapaces de mantenerse firmes en una reivindicación. Su ausencia de capacidad gestora nos deja vendidos, en este y en todos los temas que necesitan de gestión, negociación y reivindicación.

¿Qué espero de los presupuestos? Nada. Nada de inversión, nada de políticas sociales y sí mucho gasto, en propaganda, en autobombo, en contratar a familiares y amigos. Mientras Nules se queda paralizada, el alcalde se dedica a ir cantando de sarao en sarao, demostrando la seriedad con la que asume su responsabilidad. Como en todo lo que hacen, estarán esperando a que hagan los presupuestos los funcionarios para poder echarles la culpa de sus fracasos, y así a ellos les queda más tiempo para hacerse un par de fotos.

*Concejal y presidente PP Nules