Esta misma semana me sorprendió ver en las efemérides que publica este diario que tiene usted entre manos, que hacía 25 años que la Dirección de la Guardia Divil cedió la Torre de Sant Vicent al municipio de Benicàssim. Desde entonces hasta ahora, el municipio ha realizado un largo peregrinar para poner en valor uno de los hitos arquitectónicos y patrimoniales más importantes de nuestra ciudad.
Hubo que demoler el cuartel que había anexo y se han hecho varias actuaciones para mantener el edificio. Ahora, por fin, después de mucho esfuerzo reivindicando su puesta en valor, el ministerio va a invertir en la torre y ya se han iniciado las obras de acondicionamiento para consolidarla y convertir el edificio en visitable y área de interpretación de nuestra historia.
Sin embargo, este año también se cumple un aniversario singular: los 35 años de la adquisición por parte del ayuntamiento de otro de los hitos patrimoniales del municipio, Villa Elisa. Sin embargo, en estos momentos Villa Elisa sigue, día a día, perdiendo valor y deteriorándose.
Desde que en el 2006 se firmara un convenio con la Generalitat, el proyecto no ha visto hora buena. El ayuntamiento licitó y pagó la obra religiosamente 1,4 millones de euros hasta que, en el 2008, el anterior alcalde, el señor Colomer, decidió dejar de pagar y parar la obra a falta de 400.000 euros. Y desde ese momento ahí sigue.
La Generalitat, aún no ha devuelto un céntimo de esos 1,4 millones y lo peor es que con el deterioro de los últimos casi diez años, ahora volver a ponerla en valor cuesta más de 2 millones de euros. Más de seis reuniones en dos años hemos mantenido con responsables de la Generalitat para desbloquear el proyecto, sin éxito. El conseller de Cultura, que anda esta semana por Finlandia, se encontrará a su llegada una nueva petición de reunión. El compromiso del señor Marzá era presentar un plan de pagos, pero el tiempo pasa y las palabras se las lleva el viento. Por dar ideas, si el Partido Socialista recuperara para España los 957 millones que estafó su director de la Guardia civil Luis Roldán, tal vez alguno podría llegar a Villa Elisa.
*Alcaldesa de Benicàssim
