El alcalde se ha reunido con la subdelegada del Gobierno, la socialista Ten. Benlloch aprovechó la reunión para intentar «tapar» al nuevo gobierno socialista trasladando a la subdelegada que «entiende la complicada situación que el Gobierno de Pedro Sánchez ha heredado del PP».

Hay que despreciar mucho la inteligencia de los vecinos para atreverse a hacer esta afirmación. La herencia que ha recibido el PSOE del Gobierno del Partido Popular es un país que se recupera de la ruina que dejaron los socialistas. El PSOE cogió el país el 2004 con el 11,5% de paro y lo dejó en el 24,8%. Por su parte el PP cogió de los socialistas un país con el 24,8% de paro y lo deja en el 15,3%. Unos datos que se han repetido en el mismo sentido en Vila-real. Después de ocho años de los socialistas en el Gobierno de España nuestra ciudad se acercó a los 6.000 parados. Con el PP esta cifra se ha reducido hasta los 3.700 parados. En en cuanto a la recuperación económica, los datos son también contundentes. El déficit con Zapatero se disparó a cotas insoportables, mientras el Gobierno del PP lo ha reducido a la mitad.

Benlloch y Sánchez tienen mucho en común. Los dos entraron a gobernar con su peor resultado electoral. Los dos están utilizando, sin ningún problema, toda la maquinaria institucional para mantenerse en el poder sea como sea. Los dos han elevado al máximo el número de asesores y cargos colocados a dedo. Los dos prometieron bajar los impuestos y han hecho justo el contrario. Benlloch nos ha subido la contribución al máximo histórico y ahora Sánchez anuncia una subida de impuestos. Los dos priorizan sus caprichos a las necesidades reales de los vecinos. Sánchez no ha dudado al hacer uso del avión presidencial para ir de fiesta al FIB mientras Benlloch destina 4 millones de euros al Gran Casino para trasladar a la calle mayor su despacho de alcaldía.

Lo volverán a hacer. Volverán a arruinar España.

*Portavoz del PP en Vila-real