Querido lector:

Que no les sorprenda el titular de esta columna. Se lo explico. La elección de Marco como candidata del PSPV a la alcaldía de Castellón mediante primarias no deja de ser un primer round ganado a los puntos, no por KO. Por lo que habrá que observar estos próximos meses hasta qué punto la miscelánea familiar que compone la militancia de la agrupación socialista castellonense continúa igual de pixelada o si por el contrario va unificándose en aras de un proyecto común.

O lo que es lo mismo, si Amparo Marco y Ximo Puig (al secretario provincial Francesc Colomer esta guerra le viene grande) son capaces de desarticular la tela de araña de intereses que ha tejido el exalcalde y actual secretario local Daniel Gozalbo empleando los modos conspiratorios de antaño y los mimbres y caras vetustos que hicieron política hace 30 años, aunque con el cartel amable de Germán Renau, para lograr un proyecto integrador.

A pesar de la derrota por la mínima de Renau, el verdadero ganador de todo este desestabilizador proceso en que se han convertido las primarias socialistas de Castellón ha sido Gozalbo, que ya lo había conseguido antes de que se celebrase. Gozalbo, ayudado por la doble cara de Ignacio Subías entre otros, ha vuelto a dividir a la agrupación socialista en dos bandos, con lo que Marco en el segundo round que tendrá lugar en noviembre cuando se evalúe la gestión de la ejecutiva local donde Gozalbo, si cumple lo dicho pondrá el cargo a disposición del partido, lo deberá tener muy pero que muy en cuenta. Lo mismo que en el tercer y último round, cuando se apruebe la lista municipal que ella proponga ante la asamblea de militantes. Si Gozalbo continúa ejerciendo, su victoria habrá sido total. ¿Por qué?

Porque el objetivo de Gozalbo siempre ha sido cargar precisamente esa mochila municipal que liderará Marco con su gente. Y la cosa le ha ido tan bien que incluso casi gana, con lo que su intención será que la carga sea aún más pesada. El verdadero combate, por tanto, para Marco comienza ahora. Primero ejecutiva y luego asamblea.