Ayer dijimos adiós a una vecina de Benicàssim demasiado pronto. La localidad sigue consternada y llena de rabia por un nuevo episodio de violencia de género en nuestro país. Está vez nos ha tocado a nosotros sufrir de cerca el asesinato y el intento de terminar también con la vida de los hijos.

Es momento de unirse y así lo hemos demostrado todas las fuerzas políticas y las administraciones en la repulsa total de los hechos acontecidos esta semana. Pero no nos hemos de quedar aquí. Para conseguir que ni una mujer más siga el mismo camino, hay que continuar con la lucha. En las administraciones tenemos la obligación de trabajar para que la prevención sea la mejor herramienta. No es una cuestión privada ni íntima, sino social.

Como mujer y representante política siento rabia de que no hayamos podido evitar este nuevo caso de violencia de género. Por ello, no voy a cesar en mi empeño de hacer una sociedad más justa. Por último, me gustaría agradecer como portavoz de C’s y miembro de la corporación benicense a todas las fuerzas de seguridad, servicios médicos, instituciones y representantes del resto del país que nos han arropado, ayudado y han mostrado su repulsa. La mejor solución a la violencia machista es el rechazo total de toda la sociedad. Solo así conseguiremos acabar con esta lacra. H

*Portavoz de C’s en Benicàssim y diputada provincial