El gigante del comercio electrónico Amazon ha explicado por qué se produjo la caída a nivel mundial de miles de páginas y aplicaciones de intertent, el pasado 28 de febrero. Según el comunicado de la empresa, todo se debió a "un error humano", una errata tipográfica de un empleado que realizaba tareas de mantenimiento en los servidores.

La falta ortográfica costó más de 150 millones de dólares (unos 140 millones de euros).

El ingeniero del equipo de S3 (Simple Storage Service: donde se guardan datos en internet de cientos de miles de págines webs y aplicaciones), según reza la nota, introdujo un comando erróneo y en lugar de apagar una pequeña parte del sistema hizo que hubiera un apagón masivo de los servidores de la compañía.

El fallo afectó también a otras empresas, como Giphy, Apple, Netflix o Spotify, por ejemplo.

DISCULPAS A LOS CLIENTES

Los servicios que quedaron afectados fueron, entre otros, Slack, Sprinklr, Venmo o incluso Down Detector, especializado en detectar fallos en las principales webs del mundo.

Amazon tardó varias horas en recuperar el normal funcionamiento, y pidió disculpas a sus clientes.

En adelante, explica Amazon, los ingenieros no podrán desactivar los servidores, y así se evitarán caídas en cascada como la del pasado 28 de febrero.