Ismael Rodríguez, el cazador que mató a dos agentes rurales en Aspa (Lérida), tenía caducado el permiso E, necesario para usar la escopeta Benelli del calibre 12 con la que cometió el crimen. La Guardia Civil obliga a depositar las armas bajo custodia de la unidad de intervención mientras se renuevan los permisos. Pero Rodríguez sorteó esta exigencia simulando que la escopeta cambiaba de propietario.

Cambiar de nombre puede hacerse en una armería. El único requisito es que el nuevo dueño debe estar en posesión del permiso correspondiente. Rodríguez vinculó la escopeta, que acababa de adquirir, a un amigo. Este cómplice tenía la obligación de quedarse con el arma hasta que Rodríguez renovara su permiso y cambiaran nuevamente de nombre el arma. Pero dejó que este segundo se la llevara. Cuando se topó con los dos agentes rurales, estaba utilizando sin permiso esta escopeta. Y disparó a los dos hombres.

Este lunes, según Europa Press, el amigo ha declarado en el juzgado como investigado y ha dicho que él no le había dejado el arma al asesino confeso, y que si la tenía es porque se la dejó olvidada en el coche del acusado dos días antes, en otra cacería y no se la había devuelto a pesar de habérsela reclamado.

“ESTÁN MUERTOS LOS DOS”

Ismael Rodríguez, el cazador de Vacarisses que mató a dos agentes rurales el pasado fin de semana en Aspa (Lérida), llamó al teléfono de emergencias 112 después de disparar contra los dos hombres. La Cadena Ser ha publicado la grabación de la conversación que el cazador mantiene con la trabajadora del 112 en la que admite lo que acaba de suceder y pide la presencia de los Mossos d’Esquadra en el lugar de los hechos.

Esta llamada se registró a las 11:39 de la mañana del sábado 21 de enero. Rodríguez declaró que fue hacia las 10:50 que los agentes rurales se dirigieron hacia él. En consecuencia habrían transcurrido unos 45 minutos entre el asesinato y la llamada al teléfono de emergencias.

En esta conversación, se escucha la voz nerviosa de Rodríguez. Durante el primer minuto, únicamente explica el punto exacto en el que se encuentra. A continuación, aclara por qué ha llamado: “Estaba cazando, y han venido los dos agentes rurales", "me he puesto muy nervioso" y "están muertos, los dos", y que "he sido yo".