La exmodelo Carre Otis volvió ayer a pisar una pasarela después de siete años de ausencia. Fue en el desfile de Elena Miró, en la Fundazione Arnaldo Pomodoro de Milán. Con una imagen que no tiene nada que ver con la mirada inocente y el cuerpo escultural que mostraba bajo el objetivo de Helmut Newton o Peter Lindberg, Otis, con el rostro cargado de bótox, se mostró satisfecha de sentirse la estrella invitada de la firma italiana de tallas grandes. "Me siento bien, el desfile me encaja y soy el perfil perfecto para la firma", aseguró. "No me planteo volver a las pasarelas. Por suerte, mi vida ya no tiene nada que ver con mi pasado como modelo. Tengo una familia y me ha costado dejar a mis dos hijos para estar aquí", dijo en el backstage.
La californiana, de 43 años, nunca desfiló en grandes pasarelas, pero sí protagonizó impactantes campañas publicitarias, al ser una de las primeras en enfundarse unos jeans de Guess. Después de triunfar en las portadas de Sport Illustrated o Playboy, su simpatía y belleza la llevaron a hacer sus pinitos en la gran pantalla, donde debutó con Orquídea salvaje, en 1990, filme donde conoció a Mickey Rourke, galán oficial de Hollywood tras Nueve semanas y media.
Lo que parecía un apasionado romance entre Rourke y Otis terminó en una pesadilla, en la que no faltó el abuso de drogas y alcohol. En 1984, dos años después de casarse, Rourke fue detenido por presuntos malos tratos, aunque ella no quiso testificar contra él. Cuatro años después se divorciaron. Otis es autora del libro Belleza rota: autobiografía, donde narra el calvario que vivió con el actor, que le ha marcado de por vida, y con el que tuvo que "batallar a diario", por sus celos y su carácter violento.
La exmodelo asegura que vive feliz en Colorado con su actual marido y sus dos hijos. De momento, segun Otis, Rourke se ha mantenido en silencio sobre el libro: "Mickey no esta contento, pero no dice nada", concluyó.
