El Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) y la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA) acaban de publicar los resultados de una encuesta que muestra que más de un tercio de los españoles reconoce cometer excesos con la comida y la bebida durante la Navidad. Como consecuencia de ello, un 13% suele sufrir molestias digestivas asociadas y una de cada cuatro personas sufre además resaca o dolor de cabeza asociados al alcohol.

Tras analizar los típicos platos navideños, la SEDCA afirma que se produce una sobreingesta de calorías, estimándose que cada una de esas comidas supone una media de, al menos, 1.500 calorías, a las que se añaden las correspondientes a las bebidas alcohólicas, lo recomendable para todo un día.

Para evitar estos problemas INFITO y la SEDCA recomiendan controlar las cantidades y limitar el consumo de dulces y alcohol. La web de INFITO ofrece una serie de consejos muy útiles para estas fiestas. Entre ellos, recomiendan beber agua durante la comida y la toma de infusiones o de preparados farmacéuticos de plantas medicinales, como por ejemplo el cardo mariano de Arkocápsulas (de venta en farmacias y parafarmacias), ayudan a aligerar la digestión y a depurar el organismo de forma natural.

Cada cápsula contiene 300 mg de polvo micronizado de frutos de cardo mariano (Silybum marianum Gaertn.) con un contenido superior al 1% de silimarina. Las dosis diarias recomendadas son tres o cuatro cápsulas al día.

Esta planta silvestre y comestible, se utiliza comúnmente por su efecto protector y corrector de la funcionalidad del hígado. El fruto del cardo mariano contiene activos que combaten las sustancias hepatóxicas como el alcohol u otros tóxicos alimentarios protegiendo al hígado. Se recomienda utilizar este medicamento natural con antelación para proteger al hígado y enfrentarse mejor a esos excesos.

Su fruto contiene silibina, silicristina y silidianina, tres sustancias que forman un complejo hepatoprotector conocido como silimarina. Ésta actúa directamente sobre las células del hígado, regenerándolas y combatiendo las sustancias que le perjudican como el alcohol y otros tóxicos de origen alimentario.