En España se diagnostican cada año entre 400 y 600 casos de malaria o paludismo importada por viajeros procedentes de zonas endémicas. La mayor parte de estos casos se diagnostican a personas que regresan a sus países de origen y se infectan, y a viajeros nacionales que visitan zonas endémicas y que no han tomado la profilaxis antimalárica. Los expertos recuerdan la importancia de la profilaxis cuando se viaja a un país endémico de malaria, la mayoría en África. EFE