El experimento de una universidad británica puso al borde de la muerte a dos estudiantes al suministrarles, por error, una dosis de cafeína equivalente a 300 cafés. El accidente sucedió en el 2015 y se ha dado a conocer al anunciarse la condena judicial. La Universidad de Northumbria deberá indemnizarlos con 460.000 euros, según informa la agencia Efe.

Los estudiantes de Ciencias del Deporte Alex Rosetto y Luke Parkin ingresaron en urgencias en marzo de 2015 después de ingerir 30,7 y 32 gramos de cafeína, respectivamente, cuando la dosis debería de haber sido de 0,3 gramos.

Los dos cobayas participaban en un programa de la universidad para estudiar los efectos de la cafeína en la práctica de ejercicio físico.

La universidad, ubicada en la ciudad de Newcastle, tendrá que pagar además 26.468 libras (algo más de 30.700 euros) en concepto de costes del juicio y de indemnizaciones.

El fiscal Adam Farrer afirmó durante el proceso que el centro educativo "no tomó las medidas suficientes para asegurarse de que su personal sabía como manejar" las sustancias del experimento, y subrayó que la sobredosis "pudo ser fatal".

FALLO EN LA CALCULADORA DEL MÓVIL

Los responsables del ensayo, según se ha conocido durante el proceso, midieron las dosis con la calculadora de su teléfono móvil y se equivocaron al escribir los decimales en las cifras, un fallo que no se corrigió al no existir protocolo alguno para asegurar la precisión del experimento.

Uno de los estudiantes afectados permaneció dos días ingresado debido a una "reacción que puso en peligro su vida" y le hizo perder 10 kilos durante ese periodo, describió Farrer.

La universidad expresó sus "hondas y genuinas disculpas" por el incidente y subrayó a través de su abogado, Peter Smith, su "énfasis en el bienestar de sus estudiantes y trabajadores".